Los trabajadores de todos los call center venimos protagonizando en el último tiempo grandes cambios. Se abrió una nueva etapa el año pasado cuando los trabajadores de Teleperformance se organizaron contra el vaciamiento de su edificio y por la regulación de la tarea, lograron recuperar el cuerpo de delegados desbordando a la dirección traidora del Sindicato de Comercio que tenía grandes acuerdos con la empresa. Eso nos mostró el camino a seguir a muchos trabajadores que queremos hacer de esto un trabajo digno, y sobre todo demostró, que si nos unimos y nos organizamos es posible pelear por lo que nos corresponde.
A su vez, la experiencia en Teleperformance estuvo acompañada por procesos de organización y lucha en otros call center como Claro, Atento, Taskphone, Hi cite y Mercado libre, etc que se plantaron contra los despidos masivos y las condiciones laborales precarias en los diferentes call centres. Incluso en otras provincias como Cordoba, Santa fe también se vienen organizando. Esto demuestra que va surgiendo algo nuevo, que se organiza por abajo.
Esta situación genero un contexto donde se tuvo que volver a tratar la Ley del Teleoperador para regular de nuestra tarea, que ya tiene media sanción en la cámara de senadores y donde las cámaras empresarias ya anunciaron, de aprobarse, despidos masivos.
Somos muchos los que nos cansamos y queremos cambiar las condiciones laborales indignas a las que somos sometidos todos los días. Porque nos cansamos de las bases basura que nos liman la cabeza con barridos que llegan hasta 250 por turno (en campañas como Telefónica). Porque no queremos que gran parte de nuestro sueldo dependa de comisiones que están atadas a no poder hacer uso de las licencias legales como días por estudio o enfermedad. Porque también nos cansamos de que nos extorsionen con cambios de horario y que nos persigan cuando estamos en periodo de prueba haciéndonoslo sentir hasta en el baño.
En Actionline los trabajadores hace tiempo damos pelea por que se respeten nuestros derechos, contra la persecución y los despidos hacia los que nos organizamos. La mayoría somos jóvenes, mujeres o mayores a quienes el laburo de call se nos presenta como la única alternativa para “sobrevivir”, de esto se agarran las empresas para imponer condiciones de trabajo que muchas veces son inhumanas. Decidimos agruparnos, porque vemos cada vez más necesario ante el vacío que dejan los delegados que nos deberían representar. El camino es el recorrieron los chicos de On video, que se hicieron respetar.
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